Alumnos de todos los centros educativos del municipio iban a acudir a la Feria del Libro en horario de mañana para participar en talleres para los niños, mientras que los talleres para adultos se habían organizado para el horario de tarde. También se querían realizar actuaciones, pasacalles, exposiciones, cuentacuentos y otras actividades novedosas.
Hay que recordar que el decreto de estado de alarma prohibe los desplazamientos para cualquier actividad que no sea esencial, y mucho menos las aglomeraciones de personas, como las que se iban a producir en la feria. Además, también se han cerrado los centros educativos, por lo que sería imposible contar con los estudiantes.
Por último, se pretendía que la jornada del 23 de abril, Día Internacional del Libro, se convirtiera en el acto central de esta III Feria, con la Lectura Pública de las obras premiadas en el Certamen Infantil y Juvenil de Relatos Cortos “Letras del Sur”, y diversas actividades en la que estaban implicadas varias delegaciones municipales.